Santo Domingo, Rep. Dom.– El periodismo dominicano, específicamente el dedicado a temas de farándula, para algunos “profesionales del oficio de larga data”, está llena de teóricos y enganchados (después que las redes están abiertas), que luego de tener un “blocitos” dedicados a este oficio, se creen de verdad periodistas.
El caso trasciende cada día, pues estos neófitos, hasta en televisión tienen programas o en su defecto, a través de sus canales digitales, emiten juicios en diversos temas del espectáculo, “bañados de propiedad para hacerlo”.
No hay control a la hora de estos personajes emitir opinión, porque las redes, a menos, que sean sus propias reglas que corrijan, terceras personas no pueden.
Los desmentidos están a la orden del día, pues la falta de conocimientos de Leyes de comunicación de RD, de los seudos periodistas, los hace cometer errores cada segundo y los mismos, son objetos de “sometimientos a la justicia por difamación e injuria”, entre otras acusaciones.
Los blogueros busca “sonido” ocupan un gran porcentaje en la prensa dominicana, incluso, algunos “se creen figuras”, porque tienen “muchos seguidores orgánicos”.
Las redes han dado como resultado, el alumbramiento de periodistas de papel, que cada segundo “surgen en la prensa nacional dedicada al espectáculo”, sin control alguno.
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