(Crédito de la captura de pantalla: WBZ-TV/YouTube)
Un hospital en Boston está impidiendo que un hombre reciba un trasplante de corazón necesario porque no ha sido vacunado contra el COVID-19.
David Ferguson le dijo a WBZ-TV que su hijo DJ, de 31 años, "está al borde de la muerte por mantenerse firme y lo han llevado al límite", revelando que Brigham and Women's Hospital le prohibió recibir el trasplante que necesita.
Según los informes, DJ, padre de dos hijos, estaba en la parte superior de la lista para recibir un trasplante de corazón, hasta que se descubrió que no tiene la intención de recibir una inoculación de COVID-19.
"Es un poco en contra de sus principios básicos", explicó Ferguson. "Él no cree en eso. Es una política que están aplicando y, como no recibirá la inyección, lo sacaron de la lista de trasplantes de corazón".
Brigham and Women's Hospital explicó la decisión con una declaración:
Como muchos otros programas de trasplante en los Estados Unidos, la vacuna contra el COVID-19 es una de varias vacunas y comportamientos de estilo de vida necesarios para los candidatos a trasplante en el sistema Mass General Brigham a fin de crear la mejor oportunidad para una operación exitosa y también la supervivencia del paciente después del trasplante.
El motivo del requisito es que el sistema inmunitario del paciente trasplantado se encuentra en un estado gravemente debilitado después de la cirugía.
El Dr. Arthur Caplan, jefe de ética médica de la Escuela de Medicina Grossman de la NYU, le dijo al medio de comunicación local que, inmediatamente después de cualquier cirugía de trasplante, el sistema inmunológico del paciente está esencialmente "apagado".
Como resultado, dijo, "la gripe podría matarte, un resfriado podría matarte, el COVID podría matarte".
"Los órganos son escasos", continuó. "No los vamos a distribuir a alguien que tiene pocas posibilidades de vivir cuando otros que están vacunados tienen más posibilidades de sobrevivir después de la cirugía".
Ferguson, quien dijo que el corazón de su hijo está gravemente deteriorado y ya no puede funcionar de forma independiente, reveló que su hijo permaneció en Brigham Women's Health, pero reveló que él y su familia están "buscando agresivamente todas las opciones" para brindarle a DJ la atención que necesita.
"Pero nos estamos quedando sin tiempo", agregó el padre desesperado. "Creo que mi hijo está peleando bastante... valientemente y tiene integridad y principios en los que realmente cree y eso me hace respetarlo aún más".
DJ no es el único al que se le ha negado la atención que tanto necesita por su elección personal.
En octubre pasado, a una mujer de Colorado que necesitaba un trasplante de riñón se le negó la cirugía debido a su decisión de renunciar a la vacunación contra el COVID-19, una elección que atribuyó a su fe cristiana, según ABC News . Vale la pena señalar que los líderes cristianos, tanto protestantes como católicos, han argumentado que es moralmente aceptable recibir una vacuna contra el COVID-19.
Leilani Lutali, que sufre de enfermedad renal en etapa 5, explicó que no pudo recibir una inoculación contra el COVID-19 debido al papel que han jugado las líneas celulares fetales en el desarrollo de algunas inoculaciones.
"Como cristiana", explicó la mujer de 56 años, "no puedo apoyar nada que tenga que ver con el aborto de bebés. ... La santidad de la vida, para mí, es preciosa".
Actualmente, los centros de trasplantes en el estado de Washington, Vermont, Massachusetts y Alabama tienen políticas que exigen que los posibles receptores de trasplantes se vacunen contra el COVID-19
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